Pueden ser muchos los motivos por los que una persona tome una decisión como visitar España. No solemos valorar lo que tenemos en este país, pero cuando vemos los datos relativos al turismo empezamos a hacerlo. Fijaros: no solo disponemos de un clima que es espectacular, sino que nuestra Historia, nuestra gastronomía, nuestra naturaleza y nuestro turismo de invierno son referencias mundiales. Está claro que España es un país que destaca por un conjunto muy amplio de cosas y tenemos la sensación de que el mundo al completo lo sabe. Por eso, año a año, mejoramos el número de turistas que vienen hasta nuestra tierra.
Una de las principales bajas con las que contamos a la hora de que nuestro país llame poderosamente la atención de propios y extraños es el vino. España es uno de los mayores productores mundiales de esta bebida junto con Francia e Italia. Y, además, en este caso somos una referencia tanto en lo que tiene que ver con la cantidad como en la calidad. Nuestros vinos se exportan a prácticamente todos los lugares del mundo y es lógico que eso genere un interés por la tierra en la que se cultivan.
Un estudio realizado por los profesionales de Statista nos ofreció algunos de los datos que rodean a la industria del vino en este 2022. Por un lado, se estimaba que el número total de hectáreas de viñedo que existe en el interior de nuestras fronteras es de 964.000, lo cual es una auténtica barbaridad que pone de manifiesto la importancia de un producto como el vino en España. Por otro lado, también se hablaba de la producción total de vino que ha sido de 35’3 millones de hectolitros. En última instancia, y yendo a lo que nos interesa, también se hablaba del número de visitantes de bodegas y museos de las rutas del vino, una cifra que ascendía a los 1’64 millones de personas.
En relación al último de los datos que os hemos comentado en el párrafo anterior os diremos que esa cifra de personas que realizan enoturismo ha sido mayor en algún otro año. Según una información que está filmada por EFE Agro, más de dos millones de personas hicieron enoturismo en el año 2015. Buena parte de la culpa de que los datos sean inferiores ahora ha sido imputable a la pandemia, así que estamos convencidos de que la tendencia se va a revertir y que ese volumen de dos millones de personas se va a recuperar más pronto que tarde.
El vino es uno de los productos de la cultura española que más se valora más allá de nuestras fronteras. Por eso, sigue habiendo personas que están interesadas en conocer todo lo que tiene que ver con él. Desde Bocopa, reconocidos internacionalmente por su vino tinto de Alicante, nos han hecho saber que las visitas a sus bodegas está empezando a recuperarse tras la pandemia y que es bastante posible que se cierre el ejercicio 2022 con una mejora de los datos que nos dejó el 2019. Sin duda, sería una noticia excelente y que esperamos con avidez.
Hay mucho turista nacional que también desea hacer enoturismo
Hay muchas zonas de este país que, a causa del lugar en el que viven, saben cómo funciona la industria del vino. Es inconcebible que alguien de La Rioja, de Castilla y León o de Castilla – La Mancha no sepa cómo se trabaja con este producto. Sin embargo, también hay mucha gente que, sin conocer esta industria de primera mano, está deseosa de hacerlo y acercarse un poquito más a todo lo que tiene que ver con la producción de varios de los mejores vinos del mundo, que tienen nacionalidad española.
Y es que muchas veces no tenemos en cuenta la gran aportación que supone el turismo nacional. En muchas zonas, los negocios que dependen del turismo se orientan hacia personas que provienen de otras zonas de Europa porque tendemos a pensar que esa gente viene con más dinero en el bolsillo para gastar, pero lo cierto es que los españoles no podemos dejar de ser un público interesante para nuestros propios negocios turísticos. El enoturismo es una de las formas de turismo que más lo está poniendo de manifiesto.
No nos cabe la menor duda de que estamos hablando de una de las formas de turismo de más importancia en el interior de nuestras fronteras. Hay que cuidarla y conservarla lo máximo posible porque puede implicar muchos beneficios no solo para nuestra economía, sino también para nuestra imagen como país. España tiene grandes vinos y grandes profesionales en una industria como la vinícola. Obtener el máximo rédito de todo ello es clave para que millones de personas no sigan eligiendo como su destino de referencia.