Estamos acostumbrados a que nos digan que la bollería es poco sana, que produce malos hábitos de consumo y que lo mejor es eliminarla de nuestra alimentación, sobre todo en los más pequeños. Son muchos los niños que ahora padecen de obesidad, aunque es cierto que el sedentarismo es su gran aliado y el gran culpable. Pues bien, yo me niego a pensar que esto es así. Porque como pasa en todas las cosas, la calidad lo pone si está hecho con buenos materiales o no. La comida más sana se puede convertir en comida basura si en su materialización no se han empleado ingredientes de calidad. Pues bien, en la bollería ocurre lo mismo.
Si la bollería y los dulces naturales están hechos sin conservantes, sin monodiglicéridos, sin aromas artificiales, sin grasas trans y sin aditivos, como nos indican desde El Moli Pan y Café, podemos tener los productos más sanos del mercados. Y es que, como aseguran, la bollería incorpora diferentes trabajos en la masa, constantes pliegues y largas horas de reposo para obtener las más exquisitas creaciones en bollería, tartas y dulces, y así hacerla sana.
Algunas de las especialidades que más nos gustan son los deliciosos Croissants de mantequilla, Les Tulipas y los Muffins. Y estos productos, si están hechos con buenos ingredientes no son poco saludables, todo lo contrario, aporta al organismo un buen número de nutrientes beneficiosos. Vamos a hacer un repaso de los bollos más sanos que puedes disfrutar en el mercado. Es mejor que leas esto con el estómago lleno, porque si no te van a empezar a salivar loas papilas.
Croissants de mantequilla
El cruasán, también escrito con el galicismo croissant, es una pieza de panadería de origen francés. Fue creada en París en el siglo XIX donde los panaderos locales se inspiraron de la forma del kifli austriaco popularizado por el panadero vienés August Zang, pero usaron una masa hojaldrada fermentada típicamente francesa que se usa también para hacer otras preparaciones como la Napolitana.
Toñas
Las Toñas son un postre clásico dentro de la repostería tradicional. Esta receta forma parte de la cocina más arraigada de la zona ya que resulta un dulce elemental en los días de fiesta. Combina a la perfección los ricos alimentos que ha dado esta tierra, destacando en su preparación los cereales, cítricos y lácteos.
Les Tulipas
Es un dulce que se puede encontrar comúnmente en España, Latinoamérica y el Sudeste Asiático. Consiste en una lámina delgada de pasta sin levadura hecha con harina, agua y azúcar o miel. A veces llevan otros ingredientes como clara de huevo, mantequilla, aceite, canela, coco rallado, piel o esencia de limón o vainilla. Pueden estar parcialmente o totalmente cubiertos de chocolate. También pueden estar rellenos de nata, dulce de leche, crema o chocolate. Además, pueden estar espolvoreados con virutas de chocolate, azúcar glas o canela.
Ensaimadas
Es un alimento de masa azucarada, fermentada y horneada, elaborada con harina de fuerza, agua, azúcar, huevos, masa madre y manteca de cerdo. Es un producto de repostería de gran tradición en la isla, ya que desde muy antiguo y de forma continuada se elabora y consume en Mallorca.
Hojaldres
El hojaldre es una masa crujiente utilizada para elaborar pasteles y otras preparaciones culinarias. Se elabora con harina, grasa (mantequilla, manteca de cerdo o margarina), agua y sal. Es crujiente después de su cocción.
Pop Dots
Vamos con cosas más modernas. Los Pop Dots son los agujeros de los Dots y se presentan espolvoreados con azúcar o bañados en chocolate. Europastry ha presentado los Pop Dots, las miniaturas de masa tierna y esponjosa del auténtico Dots. La verdad es que es una gozada. Los Pop Dots tienen grandes ventajas para su comercialización y consumo, ya que se distribuyen congelados, conservando intactas todas sus propiedades. Es un producto sin conservantes ni colorantes artificiales que tan solo se debe descongelar para su consumo. Además, los Pop Dots se elaboran sin grasas.
¿Qué te han parecido todas estas especialidades de bollería? La verdad es que mi infancia me recuerda a todo ellos. Los famosos triángulos, los pepitos, los bollycaos, pero es cierto que el tiempo ha pasado y ya no se hacen igual. Afortunadamente, ya que se ha conseguido hacerlos más sanos, pero sin perder su intenso sabor. Aún recuerdo cuando llegaba a casa del colegio, sobre las 2 de la tarde y me madre siempre te tenía preparado un pepito de chocolate para hacer hambre. Qué tiempos aquellos. Y sí, he crecido bien y sin problemas de colesterol.